Hoy nos pegamos 50 millas , mitad a motor , mitad a vela con el viento justo de frente.
La idea era ir a Cascais, pero como el viento nos llevaba directo a Oeiras , allí que nos vamos , entrando de noche .
En esta marina nos traen por la mañana un pan para desayunar. Es un detalle por su parte.
Miguel aún no está para caminatas y se queda a bordo mientras el patroncito se va de turismo.
La Torre de Belém con colas interminables para entrar y cambiar de piso dentro de ella.
La iglesia y claustro de los Jerónimos . Muchedumbres inmensas por todos lados . Se oye mucho español y se ve mucho chino .
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