Al final el viento va aflojando , sube y baja y hacemos bastante trayecto a motor.
Entramos en Motril que tiene un Club Náutico estupendo con piscina y toda la pesca.
Joserra se perdió la sirena para su nieta. Nosotros seguimos sin saber "por donde" y entendemos al pescador que la devolvió al agua.
N. R. : Erase una vez dos pescadores que salieron a pescar y tras una dura jornada , uno de ellos sacó una sirena. La izó a bordo , la observó y la devolvió al agua.
¿ Por qué ? preguntó el otro.
¿Por dónde ? respondió.
Una frugal cenita de una ensalada y una fritura de pescado.
Nos faltaron 3 pobres para compartir.
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